La actividad energética registró un leve descenso durante el tercer trimestre de 2025 (julio-septiembre) en comparación con el mismo período del año anterior, aunque mostró una recuperación en relación con el trimestre previo.

De acuerdo con datos oficiales, el Índice Sintético de Energía (ISE) presentó una baja interanual de 0,2%, mientras que en la medición intertrimestral evidenció un incremento del 1,8%. Las estadísticas del INDEC indican que el desempeño del sector petrolero y el crecimiento de la autogeneración eléctrica contribuyeron a amortiguar el retroceso general.

Electricidad y gas, los factores que empujaron la baja
En el segmento eléctrico, la generación neta del Sistema Interconectado Nacional —que excluye la energía utilizada como insumo por las propias centrales— disminuyó 1,6% interanual en el tercer trimestre. Esta merma estuvo vinculada principalmente a una menor generación térmica, según detalló el organismo.

De cara al último trimestre del año, las expectativas empresarias se encuentran divididas: el 50% de las firmas prevé un aumento de la demanda interna y el resto considera que se mantendrá sin cambios. En materia de exportaciones, el 83,3% no proyecta realizar envíos al exterior y el 16,7% estima que no habrá variaciones.

En cuanto al sector gasífero, el volumen de gas distribuido cayó 3,4% interanual, como resultado de una menor entrega a usuarios industriales y residenciales. Esta medición no incluye el gas destinado a las centrales eléctricas.

Las proyecciones para el próximo trimestre muestran un clima mayormente estable: el 91,7% de las empresas considera que la demanda interna no variará y el 8,3% espera un incremento. Respecto de las exportaciones, el 75% no prevé ventas externas, mientras que un 16,7% cree que se mantendrán y un 8,3% anticipa un aumento.

El petróleo moderó el impacto negativo
Los derivados del petróleo incluidos en el cálculo del ISE, medidos en toneladas equivalentes de petróleo (TEP), exhibieron un crecimiento conjunto del 4,4% interanual en el tercer trimestre.

Dentro de este grupo, el gasoil neto de centrales eléctricas fue el producto con mayor incidencia positiva. No obstante, las perspectivas para el cuarto trimestre son moderadas: el 45,5% de las compañías estima que la demanda local disminuirá, el 36,3% cree que no habrá cambios y el 18,2% anticipa una suba.

En relación con las exportaciones, el 36,4% proyecta una caída de los envíos, el 27,2% espera estabilidad, el 9,1% prevé un aumento y el 27,3% no contempla exportar.

Fuerte avance de la autogeneración eléctrica
La autogeneración de energía en la minería y la industria manufacturera creció 7,9% interanual, impulsada por un aumento del 3,8% en la energía despachada al Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) y del 9,1% en la destinada al autoconsumo.

En sentido opuesto, la cogeneración industrial mostró una contracción del 2,9% frente al mismo período del año anterior.

Biocombustibles: señales contrapuestas
El relevamiento también reflejó comportamientos disímiles en los biocombustibles. La producción de biodiésel cayó 9,6% interanual, con un descenso del 28,4% en los despachos al mercado interno y una baja del 3,7% en las exportaciones.

En cambio, el bioetanol registró un aumento del 5,3%, explicado por una suba del 3% en la producción a partir de caña de azúcar y del 7,7% en la elaborada con maíz. Los despachos al mercado interno de este combustible crecieron 4,1%.