El gobernador Maximiliano Pullaro, junto a la vicegobernadora Gisela Scaglia, encabezó este martes la presentación oficial de las tobilleras duales que comenzarán a utilizarse en la provincia como parte de una estrategia para prevenir hechos de violencia de género. Los dispositivos demandaron una inversión superior a 1 millón de dólares y serán gestionados por el Ministerio de Justicia y Seguridad.

Durante el anuncio en el Salón Blanco, Pullaro destacó que la incorporación de esta tecnología implica un “cambio de paradigma”. Explicó que la gran diferencia con sistemas anteriores es que ahora la responsabilidad recae directamente sobre el agresor, quien deberá portar tanto la tobillera como el equipo de geolocalización. “Estos dispositivos cuentan con una inversión provincial de casi $1.500 millones, sumado al mantenimiento y el sostenimiento que tiene un costo de 688 dólares mensuales y los que son domiciliarios cerca de 600 dólares mensuales, con lo cual son muchos recursos que va a destinar por mes el Gobierno de la provincia para que este dispositivo pueda funcionar correctamente”, señaló.

El gobernador subrayó que “esto no es solo una inversión pública, sino que es parte de un sistema de seguridad pública coordinado con el Ministerio Público de la Acusación y con el Ministerio de Igualdad y Desarrollo”, y remarcó que la operatividad del dispositivo se apoya en el despliegue policial en las grandes ciudades. Según afirmó, ese esquema permite que, ante una incidencia priorizada, la Policía pueda llegar “en menos de cinco minutos”.

Pullaro sostuvo que con la implementación de la tobillera dual, “cambia el paradigma porque el agresor será la persona que lleve la tobillera y el dispositivo que lo geolocaliza y eso estará monitoreado las 24 horas por el personal policial que está al servicio del 911”. Añadió que el sistema permitirá detectar en tiempo real si un agresor se acerca a la víctima: “A la víctima no la estamos revictimizando, sino que al agresor lo vamos a estar controlando permanentemente”.

Del acto participaron también los ministros Pablo Cococcioni (Justicia y Seguridad) y Victoria Tejeda (Igualdad y Desarrollo Humano); la fiscal general María Cecilia Vranicich; las secretarias Alicia Tate, Virginia Coudannes y Lucía Masneri; el director de Atención de Emergencias, Pablo Polito; el fiscal regional Jorge Nessier, y autoridades policiales y penitenciarias.

Vranicich señaló que desde el Ministerio Público de la Acusación “estamos trabajando en la instalación de criterios para imputar femicidios en contexto de criminalidad organizada, ya tenemos antecedentes, producción y sistematización de información sobre femicidios y muertes violentas de mujeres con un registro único en la provincia de Santa Fe”. Recordó además que “el año pasado tuvimos 30 mil legajos iniciados en violencias de género” y destacó la consolidación de la persecución penal de estos delitos.

Los dispositivos incluyen una tobillera electrónica y un rastreador que deberá portar el agresor denunciado. La víctima contará con un equipo similar a un teléfono celular que le notificará si el agresor se acerca a su domicilio o a otros lugares, permitiéndole resguardarse. El sistema funciona mediante GPS y el monitoreo permanente del 911. Polito explicó que “lo novedoso de esto es que va a ser a través de disposiciones que haga la Justicia, se van a tener que respetar zonas de exclusiones, el agresor no se va a poder acercar ni al domicilio ni al ámbito de trabajo de la víctima y además va a tener un monitoreo que va a ser de manera dinámica que permitirá tener una respuesta policial temprana”.